Este dato no es fácil de determinar sin conocer la dificultad, la evolución y el momento actual de la persona. De todas formas, esto es algo que vamos a hablar en las sesiones que tengamos, de modo que sepas siempre en qué momento del proceso terapeutico nos encontramos. En las 3-4 primeras sesiones hacemos una evaluación detallada, y también irás trabajando ya en algunos aspectos que te irán haciendo reflexionar sobre la dificultad actual, desde otro punto. Entonces recibirás un plan de tratamiento (suele oscilar entre las 10 y las 15 sesiones) que se centrará en trabajar los distintos aspectos ya identificados en la etapa previa.
La terapia es un proceso vivo, en el que hay unas dificultades iniciales que pueden solucionarse; y también puede ocurrir que aparezcan nuevas demandas por parte del paciente. Al ser el proceso dinámico, además de centrarnos en lo que tratamos tendremos momentos cada 3 sesiones para valorar el punto del proceso en el que nos encontramos.